Extracciones e injertos óseos
Es mejor extraer un diente impactado antes de que afecte a los dientes circundantes. Una vez extraído el diente, la pérdida de hueso dental se soluciona con un injerto óseo. El injerto óseo es un procedimiento que se realiza para reemplazar la pérdida de hueso en la mandíbula que está anclando los dientes utilizando una o más opciones diferentes de injerto óseo. Si le faltan dientes o huesos en el maxilar superior, el injerto óseo podrá estimular el crecimiento óseo necesario para remodelar la mandíbula y prepararla para los implantes dentales. Estos implantes se utilizan para sustituir los dientes perdidos.
Condiciones que deben cumplirse para el injerto óseo
- Una buena biocompatibilidad es un requisito de los implantes dentales óseos que hay que cumplir.
- La capacidad de restaurar la forma y la función normales del hueso en la zona del defecto es también un requisito para los implantes dentales y los injertos óseos.
- También es importante que tenga un efecto osteoinductor u osteoconductor.
- La tasa de absorción del material de injerto óseo está coordinada con la formación de hueso nuevo; de lo contrario, el material de injerto óseo se absorbe demasiado rápido, lo que provoca osteogénesis. Por lo tanto, elija materiales de alta calidad para la cirugía de injerto óseo.
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